Mientras estudiaba para sacarme el título de Personal Shopper me di cuenta de que no todas las reglas que me estaban enseñando valían para todo el mundo. Yo soy de las que piensa que un buen fondo de armario no es el mismo para todo el mundo pero las pautas básicas siempre nos pueden ayudar a todos, de ahí está serie de posts. 

Tip: Para sacar el máximo partido a las prendas de la parte inferior hay que tener tres prendas para la parte superior.

¡Empezamos con las partes de arriba!

Os recuerdo que esto es en términos generales ya que no todos tenemos el mismo trabajo ni las mismas necesidades pero, cómo os he dicho antes, nos puede facilitar mucho este proceso y así empezar con buen pie a crear nuestro fondo de armario perfecto. ¡Otra cosa! Cuando hablamos de las prendas que tenemos que tener en el armario yo me refiero siempre para ir a trabajar la mayoría de veces y así facilitarnos el día a día. Yo siempre aconsejo ir un poco más allá y echar mano de otras prendas para los momentos de ocio. Esto nos permitirá desconectar y variar un poco más, siempre va bien ¿verdad?

Chaquetas: Han de ser sueltas y no de traje completo para poder ganar mayor versatilidad. Las usaremos para combinar con faldas, pantalones y vestidos para trabajar. Deberíamos tener mínimo dos, con tejidos lisos para ganar versatilidad y en colores oscuros ya que estilizan. Depende del tipo de trabajo optaremos por prendas más "serias" cómo puede ser una blazer o más actuales. 

Camisas: Si hablamos de proporciones y de reglas, en un armario deberíamos tener tres camisas por traje (ahora hablamos de cuantos hemos de tener). ¿Qué sería lo ideal? Una camisa negra, una marrón o beige, una azul marino y of course, una camisa blanca: de esta última yo diría que hay que tiene un mínimo de dos. El blanco es un color que nos saca de más de un apuro, suele quedar bien a todo el mundo y combina prácticamente con todo. La puedes usar con pantalones vaqueros, de vestir, informales, con faldas, debajo de vestidos, debajo de jerseis, cómo sobrecamisa... ¿Cómo debería de ser la perfecta camisa blanca? Semientallada o ligeramente suelta y de algodón.

Camisetas: Las camisetas son normalmente, la prenda estrella de casi cualquier armario. Son muy versátiles porque se pueden usar en casi todo tipo de ocasiones y con casi todo tipo de prendas. Para hacernos con nuestras camisetas solo tenemos que buscar aquellas que tengan el escote que más nos favorezca. ¿Colores? Blanco, negro y gris. ¿Cuantas? 2 de cada. ¿Otros colores? Yo recomiendo tener unas 5 de colores saturados que nos favorezcan para así darle un toque a los looks y salir de la rutina de colores neutros de vez en cuando

Tops: Se pueden utilizar de mil formar: debajo de una americana para dar un toque sexy, con un cardigan para aportar un look romántico, con un jean para salir... Siempre deberíamos tener uno negro y uno blanco pero estaría también muy bien disponer de un par en tejidos satinados y con colores vivos. Estos últimos nos van a sacar de más de un apuro.

Jerséis: Yo soy una fan declarada de los jerséis, soy una friolera declarada y me salvan durante todo el invierno. Si hay una prenda en la que hay que gastar un poco más es en buen jersey. ¿Qué nos evitaremos con esto? Que se estropeen antes de tiempo con la aparición de las "dichosas pelusillas". Cómo siempre, adquiriremos varios en tonos neutros y algunos en colores vivos. Al igual que pasa con las camisetas yo optaría por comprarlos con escotes que nos favorecieran. ¿Tejidos? Lo ideal sería poder conseguirlos en cachemir pero al ser un tejido más caro podemos optar por el algodón. ¿Por qué algodón y no lana? Comprarlos de lana también está bien pero se estropean antes y hay que tener cuidado a la hora del lavado. El algodón es mucho más sufrido y dura más en perfecto estado.

Traje chaqueta: Solemos pensar que los trajes chaquetas ya no están de moda pero a mí me gusta incluirlos por la versatilidad que tienen ya que, aunque puedan parecer serios, en los colores adecuados y con los complementos ideales pueden utilizarse para muchas ocasiones. Además, ahora contamos con una gran cantidad de cortes y si, el clásico negro no te convence, podemos ir a otros mucho más informales o actuales. Si queremos adquirir un traje cómo fondo de armario, lo mejor, es que sea de color neutro. Cómo ya os he dicho antes, no tiene que ser clásico pero si de la mejor calidad que nos podemos permitir. Lo podemos combinar: con cuelo vuelto, con camisa, con top, con camiseta, sin nada debajo, por separado, con jeans, con falda, con otra chaqueta, con zapatillas, con bailarinas, con zapatos de tacón... Las posibilidades son muchas y vale la pena invertir en uno.